La plata ha sido codiciada durante siglos por su belleza y versatilidad y, a causa de este valor, ha sido ampliamente imitada a lo largo de los años. Si te preguntas si la pieza que tienes entre manos es buena, te explicamos cómo saber si es plata o es una imitación, lo que te ayudará a despejar todas las dudas, así que apunta, que estás a punto de conocer si tienes una joya o una baratija.
¿Cómo saber si es plata?
Inspección de la pieza
Uno de los primeros pasos para verificar si una pieza es de plata auténtica es buscar inscripciones o sellos de autenticidad en la joya. Las piezas de plata legítima suelen estar marcadas con números como “925” o “Sterling”, que sería plata de ley, lo que indica que la pieza contiene un 92.5% de plata pura.
Este tipo de sellos son una indicación estándar de plata de alta calidad. Sin embargo, la ausencia de una inscripción no necesariamente implica que la pieza sea falsa, pero es un primer indicio importante.
Prueba del imán
¿Cómo saber si es plata gracias a un imán? Pues porque la plata no es magnética, así, una prueba sencilla es usar un imán fuerte. Si la pieza es atraída por el imán, es probable que contenga otros metales y no sea plata pura.
Esta prueba es especialmente útil para detectar imitaciones baratas, aunque no es infalible, ya que algunas piezas pueden tener un recubrimiento de plata sobre un metal magnético. Aun así, es un buen punto de partida para una verificación rápida.
Color de la joya
Observa el color de la joya bajo una luz brillante. La plata auténtica tiene un brillo característico, diferente del acero inoxidable o los recubrimientos plateados. La plata esterlina es más mate comparada con otros metales, y su tonalidad es más cálida.
Además, con el tiempo, la plata auténtica tiende a desarrollar una pátina única que le da un aspecto envejecido, a diferencia de las imitaciones que pueden mostrar decoloración o desgaste irregular.
Prueba del hielo
Una prueba tan interesante como curiosa es la del hielo, pero ¿cómo saber si es plata gracias a un cubito de agua helada? La plata tiene una alta conductividad térmica, lo que significa que transmite el calor (o el frío) muy rápidamente.
Coloca un cubito de hielo sobre la pieza de plata, así como en otras joyas que conozcas su metal y observa. Si es plata auténtica, notarás que el hielo se derrite mucho más rápido en comparación con otros metales. Esta es una de las pruebas más prácticas y reveladoras que puedes realizar en casa sin necesidad de equipo especializado. ¿No te parece curioso?
Prueba del raspado
No recomendamos mucho esta prueba, pues es más invasiva, pero la prueba del raspado puede ser muy efectiva. Raspa ligeramente una parte de la pieza en un área no visible. La plata auténtica es homogénea en su composición, lo que significa que la capa debajo debería ser del mismo color que la superficie.
Si notas que debajo de la superficie hay un color diferente, es probable que la pieza tenga un recubrimiento de plata sobre otro metal. Esta prueba, sin embargo, debe hacerse con cuidado para no dañar significativamente la joya.
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