Ya hemos comentado en ocasiones anteriores que el negocio de la compra venta de plata está cobrando cada vez más auge, y todos podemos comprobarlo viendo la cantidad de negocios de este tipo que se están abriendo y los muchos anuncios que se ven en los periódicos. También hemos comentado ya que no sólo es interesante invertir en plata hoy en día, también la venta de plata es una buena opción si se necesitan pequeñas cantidades de dinero y no se quiere acudir a un banco para evitar pagar intereses durante años o, simplemente, porque creemos que no nos darán el crédito que vamos a pedir.
Si se poseen piezas de plata de las que no nos importa desprendernos, su venta es una buena opción para conseguir el dinero que necesitamos. Pero muchos de vosotros pensaréis, «Vendo plata, pero… ¿cómo lo hago?».
Pues es más sencillo de lo que parece, pero hay que seguir ciertos pasos para evitar equivocarnos o que nos engañen.
En primer lugar conviene sopesar bien los objetos de plata que tenemos, valorar si estamos seguros de venderlos para evitar tener grandes remordimientos tras su venta. Quizá no queramos vender una pequeña sortija que nos regaló la abuela cuando éramos pequeños, pero no nos importe desprendernos de unos candelabros que una tía lejana nos dejó en herencia.
Una vez que tenemos muy claro que queremos vender nuestros objetos de plata, debemos asegurarnos de que no nos engañan. Debemos estar seguros de que nuestras piezas son realmente de plata y de que no tienen aleaciones con otros metales, así que lo mejor es acudir a un joyero para que nos asegure que nuestra plata es pura y la cantidad de plata de la que disponemos. Lo ideal es pedir varias opiniones, para estar bien seguros.
El siguiente paso será informarnos del precio de la plata en el momento en que vamos a vender. Para conseguir esta información debemos consultar en varias casas de compra venta y también leer las noticias publicadas al respecto, seguramente los precios varíen un poco, pero por lo menos tendremos claro el precio aproximado que nos deben pagar por nuestras piezas de plata.
Y finalmente ya solo nos queda vender la plata. Para ello debemos elegir un establecimiento de confianza, del que tengamos información, con un teléfono al que llamar y un local fijo al que acudir y, sobre todo, un establecimiento que nos abone la cantidad completa en el momento en que entreguemos nuestras piezas de plata.
Y ya está. A partir de ahora tu única pregunta será, «Vendo plata, ¿en qué me gasto el dinero?».